martes, mayo 30, 2006

Conforme continúa pasando el tiempo se hace más difícil escribir. Tiempos de exámenes y de trabajos, de dibujos y de entregas. A falta de 14 días para el final de facto del curso, nos encontramos plagados. No exageraría si digo que trabajamos 10 o 12 horas diarias. Unos días más, otros menos. Sin embargo, el tema que quiero tratar hoy no va por ahí, sino de los exámenes en sí.
Hay quien dice que el aprobado o un suspenso del alumno depende del profesor. Otros opinan que el responsable principal es el alumno. Sin embargo, yo opino que en el aprobado influyen muchísimas cosas, entre ellas las más importantes son el alumno, los exámenes, los compañeros del alumno y el profesor, por este orden.
El alumno es la base de la pirámide. Sólo si el alumno quiere podrá aprobar, y nadie lo pone en duda. Y no he dicho "sólo depende del alumno", que nadie cambie mis palabras.
También considero que es muy importante el tipo de exámen. Se pueden encontrar tipos de documentos muy diversos, como el tipo test con breve desarrollo, muy conveniente para asignaturas donde la teoría es lo de menos, según mi parecer. Con esto resulta más fácil estudiar, se demuestran igualmente los conocimientos, pero de manera distinta y, cómo no, resulta más fácil de corregir para el profesorado. Es curioso que se puede dar el caso de tener una nota negativa.
Existe también el examen de desarrollo desde el principio hasta el final, cuyos síntomas son los sofocos, agobios, consultas compulsivas al reloj, dolores de muñeca y numerosas caras de autocompasión tras finalizar el examen.
Podemos encontrar también el exámen "porque yo lo valgo" , que debe su nombre a la forma de corregirlo, en el que se hace una mezcla de varios modelos en uno solo. Ventajas: si un apartado no se te da bien, los otros lo contraarrestan; no suelen ser muy largos. Desventajas: la forma de puntuar determina el futuro del alumno.
El examen de desarrollo descafeinado es aquel en el que se nos presenta que desarrollemos un tema concreto, pero lo que se nos pide son párrafos que no suelen ser muy largos, pero con numerosas preguntas que pueden hacer que el tiempo sea insuficiente. Su principal inconveniente es que si no se conoce el contenido del párrafo es un todo o nada.
Aparte quedan de este análisis los exámenes de otros idiomas, que no permiten ser incluídos de forma similar al resto de asignaturas.
Para mí no hay un modelo de examen mejor que otro principalmente por dos motivos: porque no me gusta ningún examen y porque en la variedad está el gusto ¿era eso de Burger King?
El siguiente factor que considero lo constituyen los compañeros del alumno: si a alguien que se sienta a mi lado (qué decir si son los dos) no les interesa una asignatura y se dedican a pasar el rato, lo más probable es que mi rendimiento baje considerablemente, como ya ocurrió una vez con ciertas pelotitas de papel y los partiditos de fútbol, estando yo en medio. Entonces la nota bajó de un 9.75 en el anterior examen a un 5 en el inmediatamente posterior.
Por último, el profesor y las condiciones que le rodean: influye de muchas maneras, como nadie puede negar. Unas ocasiones de forma positiva y en otras, saliendo perjudicado el alumno. Lo que es normal, pues las relaciones sociales no se pueden evitar, por muy profesional que se sea. Claro ejemplo es que para lo bueno y para lo malo normalmente cada profesor tiene su alumno típico de ejemplo.


Como ya he dicho quedan muy pocos días de clase, y me gustaría despedirme de este curso con un gran artículo resumen del curso. Se agradecen ideas y sugerencias, principalmente de actos que vayan a quedar ya para siempre.